Probando las escuelas de alemán

Después de hacer el día de prueba en las dos escuelas, para decidir dónde hacer el curso de B2, me di cuenta de la enorme diferencia que existe entre una y otra, por eso es muy importante tener muy claro lo que quiere hacerse en Alemania y los motivos para estudiar alemán. Así, es posible elegir el enfoque correcto.

Después de leer mi experiencia, seguro se puede entender mejor a qué me refiero. Igual, para contextualizarte, puedes leer cómo fue que llegué a hacer estas pruebas.

Volkshochschule

En esta escuela tienen un enfoque más académico (los asistentes eran gente muy joven que esperan hacer o terminar sus estudios universitarios), se estudia más detalladamente y se cuida mucho la gramática; lo que es muy bueno. Lo que me desilusionó fue que cuando me enseñaron el libro con el que íbamos a trabajar, era un B1 plus y no un B2 como yo esperaba. Luego vi que el plan de estudios es así, pero en ningún momento me lo habían aclarado antes. El curso está dividido en dos partes y la que es en verdad B2 es solo la segunda. Así entendí que me llevaría mucho tiempo, aunque seguro avanzaría con paso firme.

Lo que me llevó a decir no, decididamente, fue que en un momento empezamos a revisar las partes del cuerpo, a escribirlas y aclararlas. ¡Me parecía increíble!. Además, como un comentario suelto (y sin conocer mis intenciones) la profesora nos contó que su esposo, que es también extranjero, había empezado su curso en zu Hause, la otra escuela. Según ella, porque allí no había cupo. Y puede ser, pero siendo ella, yo se lo hubiera conseguido…

zu Hause e.V.

Lo que más me gustó de esta escuela fue que trabajan con el mismo libro con el que yo hice mis anteriores cursos (Berliner Platz) y el tipo de asistentes; todos profesionales, con la idea de insertarse lo antes posible en el mercado laboral. Los temas de la clase también demostraron ir en esa línea, ya que la última tarea había sido elaborar la hoja de vida en alemán, de acuerdo a las normas alemanas. Me pareció genial poder combinar estos aspectos de la vida diaria (y de tareas que con toda seguridad tenía que hacer) con el aprendizaje. Sin lugar a dudas iba a ser más productivo para mi que repasar las partes del cuerpo. Por esto, me decidí por esta escuela. Si quieres saber más sobre ella, puedes leerlo aquí.

Para terminar les digo que es importante recordar que pueden haber grandes diferencias entre ciudades y es mejor que cada uno pueda experimentar y estar seguro de estar en el lugar adecuado. Esa es la mejor manera de aprender alemán.

El curso de integración

Sobre el curso de integración que hay que hacer al llegar a Alemania se dicen muchísimas cosas, la mayoría negativas. Ya les conté en mi llegada a Alemania que tenía miedo de tener que hacerlo. Después entendí que el curso de integración es una obligación, pero es al mismo tiempo un privilegio o regalo. Esta parte es la más importante.

¿Qué es el curso de integración?

El curso de integración es un curso al que se tiene derecho y obligación de participar una sola vez. Es subsidiado por el estado y está dividido en dos partes: curso de idioma y curso de orientación.

El curso de idioma consta de 600 horas, que en realidad corresponde a 100 horas por curso: A1-1, A1-2*, A2-1, A2-2, B1-1 y B1-2. La idea es poder expresarse en la vida cotidiana, tanto a nivel oral como escrito. No hay necesidad de hacer todas las horas, simplemente se empieza en el nivel que uno tiene en ese momento. Esto se define por un examen que se presenta antes de realizar la inscripción.

El curso de orientación incluye 60 horas donde se aprende sobre la vida alemana, la cultura, los principales sucesos, la política, entre otros. Es muy interesante y se termina sabiendo más de historia alemana que la que se sabe del propio país.

Además, incluye la participación en el examen de idioma y en el examen del curso de orientación. Ambos deben aprobarse para poder recibir el certificado del curso de integración.

¿Quién tiene que hacer el curso de integración?

Al curso de integración tienen derecho aquellos que llegan a vivir a Alemania, excepto con visa de estudios (supongo que pueden haber más excepciones). Sé que en los europeos es libre el hacerlo o no. En mi caso, yo recibí mi permiso de residencia y una carta para inscribirme en el curso. En tres años, cuando vaya a renovarlo, debo llevar el certificado de aprobación del curso si quiero recibir una residencia por tiempo indefinido. Además, aquellos que quieran la nacionalidad alemana, podrán lograrlo con más facilidad.

Permiso para curso de integración

Carta para la inscripción

¿Qué es importante tener en cuenta?

Diría que lo más importante está relacionado con los derechos que se tienen. Mi experiencia fue muy buena y la recomendaría, pero me he dado cuenta que a otras personas no les ha ido tan bien. Por esto, les doy estos tips:

  • Cada uno tiene derecho a elegir la escuela de idiomas donde quiere hacer su curso. (Mira cómo elegí la mía)
  • La carta de autorización para realizar el curso es un tesoro, no la entregues hasta que no estés completamente seguro de querer hacerlo en esa escuela que te ha pedido que se la entregues. Esto lo digo también porque a algunos españoles les ha pasado que la escuela les gestiona la carta y cuando les llega a casa, simplemente la llevan a la escuela, incluso estando insatisfechos con las clases.
  • Es muy importante hacer un examen antes de inscribirte. Exije que se te informe tu nivel y un cronograma detallado, para que te asegures de que te están inscribiendo en el nivel que te corresponde.
  • Tienes derecho a cambiar de escuela si no estás satisfecho, puedes hacerlo al terminar un curso y deben devolverte la carta para poder inscribirte en otra.
  • Trata de no faltar a clase nunca. Esto va a ayudarte después, en caso de no aprobar el examen o para solicitar el reembolso de lo que has pagado por todo el curso.
  • Se paga 1,20 euros por hora, exceptuando los que reciben ayuda del gobierno.

Espero haberte dado claridad sobre este tema tan importante y mucha suerte con tu curso de integración.

*A1-1 y A1-2 no aplica para los casados con alemanes, porque la norma en este momento exige tener al menos un nivel A1 certificado, para poder ser recibidos en el país.

Iniciando el curso de integración

Finalmente empezaron mis clases de alemán; una parte importante del curso de integración y estoy feliz porque sé que tomé una buena decisión con respecto a la escuela.

El resultado de mi examen de nivel fue que debía iniciar con el B1-1 y yo estaba un poco desilusionada porque en Medellín, en el Instituto Alexander Von Humboldt, hice un curso intensivo de B1-1 y no esperaba tener que repetirlo en Alemania. Aun así, lo mejor era hacer caso y tratar de hacer las cosas lo mejor posible. Olvidarme de que iba a repetir y aprovechar la oportunidad para mejorar mi alemán y llenar mis vacíos.

El primer día de clase

Mi primer día de clase fue un poco extraño porque en realidad solo era el primer día para mí. Mis compañeros llevan estudiando juntos desde el año pasado, la mayoría. Algunos empezaron desde el nivel A1, otros fueron saliendo y algunos otros entrando. De esta manera se conformó nuestro grupo, de aproximadamente 15 personas; aunque no todos asisten juiciosos todos los días. Además, tampoco hay una pausa entre curso y curso, vienen estudiando de seguido. Esta misma semana estaban terminando el A2-2 y la próxima, saldremos a vacaciones. ¡Yo con las ganas que tengo de estudiar!

Mi grupo

Otro punto interesante es la variedad de nacionalidades que hay en mi grupo, hay personas de España, Turquía, Brasil, Irán y principalmente de Siria. Y esto me gusta mucho porque tendré la posibilidad de conocer otras culturas e historias y sobretodo, porque seguro hablaremos siempre en alemán, que es muy importante para avanzar en el idioma. Esta realidad me ayudó también a comprender que no solo los casados con alemanes hacen el curso de integración, también los europeos y los refugiados.

El profesor

Y por último, el profesor, Christoph. Es excelente, muy bueno en lo que hace, tiene mucha experiencia, es amable, gracioso, le da mucha importancia a cada uno… Me gusta mucho su manera de enseñar, es muy claro y dedicado.  Y en últimas, esto es lo más importante de todo. Además, es increíble, pero no he sentido en ningún momento estar repitiendo el nivel, no sé cómo hace, pero es completamente diferente al que había hecho. Y esto lo hace todavía mejor.

Y ya puedo irme a celebrar el inicio de mi curso con las tres semanas de vacaciones que nos han dado :).

Buscando una escuela de idiomas

Decidirse por una escuela de idiomas para hacer el curso de integración no es tarea fácil y mucho menos cuando todavía no se tiene bien claro qué es, cuántos meses, las opciones que se tienen, entre otros. Por eso es mejor tomarse su tiempo. Yo pienso que la escuela que elija influirá directamente en los próximos meses de mi vida.

Y como tenía que empezar por algún lado, agarré el listado de las que ofrecen el curso, «Integrationskursorte» y empecé a evaluar los siguientes criterios:

  • Cercanía a mi casa
  • Prontitud para iniciar el curso
  • Cantidad de estudiantes por grupo
  • Intensidad / duración
  • Comentarios en la web sobre las experiencias personales (aunque de esto se saca muy poco)

Después de esta pequeña evaluación me quedaron solamente tres o cuatro escuelas y decidí ir a visitarlas, para conocer la gente, la infraestructura, los grupos de estudiantes, la metodología…

La primera fue Berlitz, una escuela conocida a nivel internacional, con un buen nombre y una localización perfecta. Al llegar me hicieron llenar un formulario donde preguntan algunos datos personales, lo que se quiere estudiar, la intensidad y algunas cosas más. Cuando terminé, me hicieron esperar para hablar con la directora. La experiencia no fue buena; aunque se veía muy profesional no me pareció amable. Quedé con la idea de que no les gusta mucho tener que ofrecer el curso de integración, por lo tanto yo no era una buena cliente para ellos. Además, el método que utilizan es el de aprender hablando y yo lo que necesito es reforzar mi gramática. Al final, me dijo que podía inscribirme para hacer el examen de nivel la siguiente semana, pero decidí que no.

La siguiente fue la «Volkshochschule» que es una escuela del gobierno donde se ofrecen cursos en muchas ramas y además alemán. No es fácil conseguir información en la web o telefónicamente en la de Leipzig. Así que fui a preguntar pero el vigilante me dijo que por ahora no estaban ofertando cursos porque no tenían suficientes profesores, ni suficientes aulas; debía esperar no se cuánto tiempo. Así que tampoco era una opción.

La tercera fue inlingua, no sabía nada de esta escuela, pero al entrar fue como amor a primera vista. Me encantó el ambiente, la familiaridad, la amabilidad con la que me atendieron y respondieron a todas mis dudas… ¡Ya quería inscribirme! me hicieron el examen de nivel de inmediato y revisaron cuando empezaría mi curso. Tendría que esperar un mes, pero ya estaba convencida, ya no necesitaba buscar más escuelas. Me inscribí 🙂 y ahora espero ansiosa el comienzo.

Aquí puedes ver cómo fue el inicio de mi curso.